No pasa nada por consumir pasta regular / blanca, siempre y cuando la acompañemos con una buena fuente de fibra para que su absorción sea más lenta, brinde más saciedad y se eviten los picos de insulina. En este caso la fuente de fibra que utilicé fue vegetales, ¡muchos vegetales!
Ingredientes:
- Pollo molido
- Brócoli
- Ajo fresco
- Cebolla
- Zanahoria
- Pimentón/ pimiento rojo
- Sal marina
- Tomillo
- Pimienta negra
- 1 lata de salsa de tomate natural (que en los ingredientes solo diga tomate y sal)
- 1 cucharada de aceite de oliva
- Opcional: queso parmesano o levadura nutricional
Preparación:
- En una sartén sofreír la cebolla y el ajo picados hasta que estén blanditos. (Puede agregarse agua si se empiezan a pegar a la sartén. NO más aceite!)
- Agregar el pimentón picado, la zanahoria y un poco de agua hasta que ablande un poco.
- Agregar el pollo molido y si es necesario un poco más de agua.
- Ir agregando la pimienta, el tomillo y la sal marina.
- Agregar el brócoli picado y la salsa de tomate natural y cocinar un rato más.
- Servir sobre la pasta al dente y si se desea agregar 1 cucharada de queso parmesano o levadura nutricional